Este domingo 21 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro Energético. En el caso del automóvil, son muchas las acciones que se pueden adoptar para reducir el consumo de energía y reducir el impacto en el medio ambiente. En algunas de ellas, el taller tiene una función importante, tanto en la revisión y mantenimiento de componentes esenciales del vehículo como aconsejando a los clientes, como recuerda Midas:

• Mantener los neumáticos a punto. Las ruedas generan entre el 15 y 20% del consumo de combustible del automóvil. Por ello, es esencial mantenerlas en un estado óptimo para reducir los consumos. Para ello, hay que vigilar que tengan la presión correcta y que se encuentren en perfecto estado y, en caso contrario, sustituirlas.
• Hacer las revisiones correspondientes. El taller es una pieza clave en las revisiones del vehículo dentro de los plazos de kilometraje señalados. Seguir las normativas e indicaciones de la marca harán que el coche se encuentre en óptimo estado y tenga un consumo de carburante adecuado.
• Efectuar el cambio de aceite. Otra tarea imprescindible del taller. Si se alargan los intervalos de sustitución del lubricante, la suciedad del fluido aumentará y se estropeará de forma más rápida. Esta degradación hará que el motor esté más desprotegido, que sus componentes se deterioren antes y que el consumo de combustible crezca.
• Cambiar el filtro del aire. Hay que sustituir el filtro de aceite siempre que sea necesario. Así se evitará la pérdida de potencia y eficiencia del motor, con el consecuente aumento del consumo,   consecuencia de tener un filtro del aire en mal estado.
• Hacer pedagogía. Aprovechando la confianza que despierta en el cliente, el mecánico puede aconsejarle sobre buenas prácticas a la hora de conducir: arrancar sin pisar el acelerador, usar marchas largas y mantén una conducción fluida, conducir con las ventanillas bajadas o reducir el equipaje.