La patronal Cetraa ha participado en La hora de La 1, el programa de TVE para hablar sobre la problemática de los talleres ilegales. Y es que el equipo de investigación del mencionado programa ha descubierto que algunos establecimientos ilegales clausurados por la policía vuelven a abrir pocos días después de ser precintados. 

Tan solo un mes después de que la policía desmantelara cinco establecimientos clandestinos en un polígono, el equipo de investigación del programa con el que ha colaborado Cetraa, visita uno de ellos. Está abierto y además pese al precinto policial. Trabajando "a pleno rendimiento", tal y como asegura la voz en off que acompaña a las imágenes. 

Al ser preguntado por el equipo de La hora de La 1, una persona que parece a cargo del establecimiento, responde: "¿Cómo vamos a pagar el alquiler?". Esa es tan solo una de las excusas que los responsables utilizan para justificarse.

No solo hacen chapuzas, también alquilan 

Lo cierto es que en algunos casos no únicamente "reparan". En ocasiones su negocio va más allá, pues también alquilan el local para que otros puedan hacer sus propias chapuzas, como es el caso del primer taller que aparece en el mencionado reportaje. La persona entrevistada asegura que trabajan por un precio de 15 euros más IVA, pese a que lo hacen al margen de la ley. Un IVA que evidentemente no declaran.

"Utilizan piezas de desguace que no cumplen con la normativa de seguridad. Piezas que afectan al sistema de frenado y de dirección", explica Luis Mascaró, director de servicios jurídicos en Fempa y secretario general de Atapaya (Cetraa Alicante).

Por su parte, Miguel Ángel Vergara, Gerente de Talleres Vergara, al ser preguntado por la situación, asegura que "como no saben lo que están haciendo, rompen cosas". Por ello, indica, una reparación que podría costar 30 euros en un taller reglado se acaba tornando en 300 en uno ilegal. Dice el dicho popular que lo barato sale caro.

No se esconden

El reportaje después pone el foco en otro establecimiento que también había sido clausurado. Su responsable asegura que como no tienen licencia lo que hacen es reparar fuera. Un cliente, sin embargo, confirma a la investigadora que sigue reparando dentro sin autorización. 

El dato es claro: uno de cada cinco establecimientos en los que se efectúan reparaciones mecánicas es ilegal. Identificarlos es sencillo: si el taller está registrado ante la administración tendrá una placa blanca y azul en la puerta. "Si no la tiene ya podemos empezar a sospechar", advierte Mascaro.

Un ilegal asegura que da garantías...

Otro de los responsables de un establecimiento ilegal, al ser preguntado por La hora de La 1, asegura frente a cámara que ellos reparan y venden. También que arreglan los vehículos y, si después pasa algo, "el cliente vuelve y se lo arreglan". 

"Usted puede dar precios mejores que los de la competencia, porque usted no paga impuestos", le reclama la investigadora. "Hombre, si no nos morimos de hambre", réplica él. 

"Por lo visto no me va a dar licencia el Ayuntamiento"

Cuando los ilegales reciben la visita de las autoridades responden como pueden. "¿Está registrado en industria?", le pregunta un agente al gerente de un establecimiento ilegal. "No, porque por lo visto no me va a dar licencia el Ayuntamiento", declara este.

El responsable así intenta esquivar la sanción, inventándose todo tipo de excusas: "Iba a cerrar este fin de semana" es la primera de ellas. La respuesta de la Policía: "¿Iba a cerrar este fin de semana pero tiene aquí los coches?".

Finalmente encuentran 9 llaves. Si bien el interrogado intenta convencer a los agentes de que son suyas y de que solo repara coches de su propiedad. Después encuentran una hoja con nombres de clientes, trabajos y precios, que definitivamente le delata. No se salva de la pertinente denuncia. 

Los desguaces clandestinos, buena parte del problema

La Policía visita un desguace y pide las autorizaciones de la parcela. "Eso lo lleva mi hermano", declara el responsable, esquivando la pregunta.

Durante la inspección se comprueba el lamentable estado de las instalaciones. Neumáticos sin sacar, suelo de tierra y no de hormigón para evitar posibles derrames accidentales, sin ir más lejos. El suelo hasta arriba de barro.

Los agentes comprueban después que la mayoría de los vehículos aún contienen residuos tóxicos. Contienen aceite usado, líquido de frenos y refrigerante, entre otras cosas. "Si llueve y se derrama todos los residuos van al suelo", explica el agente.

El responsable del desguace se enfrenta a un posible delito contra el medio ambiente. 

Consecuencias administrativas, y también legales

En este sentido, en el programa explican que hay que distinguir entre un taller sin licencia y sin dar de alta en la seguridad social ni en industria y las consecuencias de su actividad. Lo primero conlleva una sanción administrativa, que va de 3.000 a 30.000 euros.

Por otra parte, están las consecuencias de lo que se haga en ese establecimiento ilegal. "Eso sí puede ser constitutivo de delito", explican en el programa. "Por ejemplo, lo hemos visto", si tú tienes los coches en mal estado eso puede dar lugar a un delito contra el medio ambiente, o si reparas un coche mal, contra el tráfico", añade la especialista consultada.

Un taller legal indignado: "¿Cómo lo hacen?"

Los talleres tienen que hacer frente a una competencia absolutamente desleal y feroz. Por eso, un gerente de un establecimiento de reparación entrevistado con motivo del reportaje, se pregunta cómo lo hacen.

Y es que el taller tiene que hacer frente a muchos gastos e impuestos, y además se enfrenta a muchas revisiones y obligaciones, como tener una empresa que recoja los residuos (y el coste que esto supone), y un lugar habilitado para almacenarlos, o contar con un cartel que regule el precio de la mano de obra, los diferentes servicios e indique las licencias del establecimiento.