La digitalización y la formación de los trabajadores son las claves por las que se debe apostar para afrontar el futuro del sector de la automoción. Estas son las principales conclusiones que han defendido Guillermo Moreno, vicepresidente de la Confederación Española de Talleres de Reparación de Vehículos y Afines (Cetraa), y Raúl Morales, director de Comunicación de la Federación de Asociaciones de Concesionarios Oficiales de las Marcas Automovilísticas (Faconauto), durante su participación en el Encuentro FER-UNIR, organizado por Federación de Empresas de La Rioja y la Universidad Internacional de La Rioja.
Esta iniciativa se puso en marcha en el mes de mayo y refleja el impacto que el coronavirus ha causado en determinados sectores, en este caso el del automóvil. Guillermo Moreno ha analizado la crítica situación que atravesaron los talleres durante las peores semanas del confinamiento, aprovechando la ocasión para reiterar la necesidad de que se realice un seguimiento de los vehículos que hay que destruir dentro de los requisitos del Plan Renove, por parte de las autoridades, así como impulsar la lucha contra los talleres clandestinos.
Por su parte, Raúl Morales ha hecho hincapié en que "ahora toca volver con seguridad y reactivar la demanda porque no podemos permitirnos que las matriculaciones sigan cayendo", y ha reconocido que el Plan Renove ha tenido un impacto "muy positivo". En lo que respecta al futuro de los concesionarios, destaca la importancia de digitalizar todos los procesos, incluyendo la venta del vehículo, así como el avance hay una movilidad descarbonizada.
El encuentro online dirigido por la periodista Rocío Ruiz, ha tenido como anfitriones a Ricardo Operé, presidente de la Asociación Riojana de Automoción (Ariato), y Alberto Canals, director de Relaciones Institucionales de Unir.
Operé ha centrado su discurso en resaltar el papel del sector en el PIB del país, explicando que se ha visto afectado tanto por el coronavirus como por la vigencia de los vehículos diésel. Finalmente, Canals ha apoyado la necesidad de digitalizar la actividad de la venta y la reparación de vehículos, subrayando la labor que realizan los centros universitarias en el aprendizaje y la transferencia de conocimientos en una era en la que la innovación se ha convertido en un imprescindible.
