"Faltan actitud y ganas entre los jóvenes". Es la denuncia que ha formulado el presidente de Cetraa ante la ausencia de relevo generacional en el sector. En una entrevista en Radio Marca Vigo, Enrique Fontán ha aludido a algunos de los problemas que, a su juicio, provocan que el sector sea poco atractivo.

"Antes, el que estudiaba automoción, realmente le gustaba. Ahora, uno quiere hacer informática pero la nota no le da y termina entrando en carrocería, pero eso no es futuro", ha asegurado. El presidente Cetraa ha señalado también el problema con los centros de formación. "Intentamos potenciar la formación dual para que tengan ganas y la complementen con prácticas remuneradas de 600 euros. Tenemos que formar gente así, pero hay muy poca y los módulos forman muy mal", ha expresado.

Fontán ha repasado también las novedades que se avecinan para los talleres, principalmente, relacionadas con la implantación del certificado SERMI, una acreditación "fundamental" para el futuro de los talleres. Además de ampliar la garantía y seguridad de las reparaciones, el presidente de Cetraa cree que este certificado puede ayudar a reducir el número de talleres ilegales. 

Una batalla "compleja"

Precisamente, sobre los talleres clandestinos, Fontán ha asegurado que se trata de una lucha de "mucha complejidad". "Como son furtivos, no existen y las inspecciones siempre van a los mismos. Hacemos presión. Hemos presentado 350 denuncias en Pontevedra, pero son muy lentas. Les echan de un sitio y montan en otro y es complicado", ha destacado.

Desde Cetraa defienden las medidas instauradas para implantar los requisitos en materia de seguridad de los talleres, a pesar de que pueda tener consecuencias. "Nuestro sector es muy exigente. Es una cuestión de seguridad vial. Al final, para los talleres es muy difícil estar al día para cumplir con los requisitos legales, lo cual me parece bien. Lo malo es que hay gente que pueda usar esto para reparar con averías que no existen", en referencia a los ilegales.

"No termino de entender cuál es la ventaja porque las reparaciones terminan siendo más caras. Como no hay factura no saben lo que le hicieron. Tenemos que aprovecharnos de eso", ha concluido.