Las relaciones entre el taller y la aseguradora forman parte de la agenda de trabajo de las asociaciones sectoriales desde hace décadas. De hecho, el Foro de Talleres, del que Ganvam es socio fundador, sirvió para materializar esa unión de fuerzas y poner sobre la mesa determinadas acciones de las compañías de seguros que perjudican la rentabilidad de los centros de reparación.

Imposiciones en el precio de mano de obra, baremos y peritaciones que rebajan en hasta el 40% el tiempo de reparación que emplean los centros, así como descuentos no negociados en las piezas de recambio son algunas de las actuaciones sobre las que venimos llamando la atención. Y es que es imposible que al taller le salgan las cuentas con estas presiones.

El cálculo de la prima del seguro ya no se hace en función de los costes reales del siniestro, sino del precio al que la aseguradora va a poder venderla mejor en el mercado. Esto hace que al taller se le asfixie con unas condiciones muy alejadas de la realidad; por no hablar de que estas imposiciones atentan contra los propios derechos del consumidor.

LIBRE ELECCIÓN DE TALLER

¿Qué ocurre si mi vehículo no va a mi taller de confianza porque la aseguradora lo desvía a un centro de su interés? Pues que está limitando mis derechos como consumidor. ¿Qué ocurre cuando llamo a un call center en caso de siniestro? El tramitador puede alterar el flujo natural del coche hacia mi taller de confianza, ¿no estamos vulnerando la libre elección de taller?

Además, no podemos perder de vista que la tecnología y la conectividad del vehículo empiezan a tener un papel importante. Hay aplicaciones que se descargan los asegurados de manera voluntaria -incluso a cambio de una rebaja en el precio de la prima- que permiten a la compañía aseguradora acceder a los datos que genere el coche conectado para anticipar patrones y ofrecer mantenimiento predictivo. Perfecto. Pero también pueden hacer propuestas que afectan al proceso de tramitación y respuesta a un siniestro y -que sin ser conocidos por el consumidor- alteran el flujo natural del vehículo hacia el taller de confianza, pudiendo excluir del mercado a negocios del sector de manera anticompetitiva.

En un contexto en el que el parque automovilístico no para de envejecer, haciendo un flaco favor al impacto ambiental y al sector posventa -pues no olvidemos que cuanto más viejo es el coche, menos pasa por el taller y de menor cuantía es el tique medio- hay situaciones que no pueden dilatarse por más tiempo.

DENUNCIA EN EUROPA

Por eso, no hemos dudado en dar un golpe en la mesa y tramitar la denuncia al Estado español ante el Parlamento Europeo por el incumplimiento de la normativa de la Unión Europea en el sector de talleres de reparación de automóviles. Este incumplimiento de cuatro directivas comunitarias y varios artículos del Tratado de Funcionamiento de la UE es el que favorece las malas prácticas de las compañías aseguradoras y, por ende, el que provoca graves perjuicios económicos a los talleres.

La campaña de adhesiones ya cuenta con más de un millar de apoyos y confiamos en que esta demanda traiga consigo un cambio regulatorio, al mismo tiempo que promueva la creación de una entidad supervisora que garantice la independencia y la objetividad de las peritaciones. Es importante que cesen estos comportamientos y que exista objetividad con respecto al reembolso o pago de la factura a los talleres. Está en juego la continuidad del sector.

Artículo incluido en el Manual del Taller de Electromecánica y Diagnosis 2022