Qué es la bomba de aceite y para qué sirve
La bomba de aceite de un motor viene a ser el corazón de nuestro vehículo ya que su función es la de distribuir el lubricante a la presión adecuada y de forma uniforme por todo el motor. Como puedes ver, es una pieza fundamental para que el motor de un coche funcione bien ya que solo una correcta lubricación garantiza un rendimiento máximo durante un periodo de tiempo prolongado.
Componentes de una bomba de aceite
En una bomba de aceite de coche puedes encontrar los siguientes elementos:
- Cárter (cuerpo de la bomba)
- Anillo de control (regulador de presión)
- Paletas del rotor
- Retorno (desplaza el anillo de control)
- Entrada y salida de aceite
El funcionamiento de la bomba es sencillo. Facilita la circulación del aceite a través del motor proporcionando presión que hace que el aceite almacenado en el cárter llegue hacia las zonas más altas para lubricar todas las partes del motor. La bomba mantiene una presión y flujo constante. Dada la importancia que tiene esta parte del motor, conviene revisarla con frecuencia y saber identificar posibles averías.
Causas de averías en la bomba de aceite
Es fundamental y necesario realizar un correcto mantenimiento del motor y cambiar el aceite cuando sea preciso. Si no cambiamos el aceite a tiempo, se produce un exceso de suciedad que puede acumularse en el filtro de la bomba de aceite y provocar que ésta no pueda mantener el flujo y la presión necesarias para enviar el aceite a todas las partes del motor.
Cuando esto ocurre se producen rozamientos dentro del motor que pueden ocasionar averías graves en su interior. La suciedad procedente de la combustión puede, incluso, bloquear los conductos de circulación del aceite.
Las averías más comunes de la bomba de aceite suelen estar relacionadas con la falta de presión, con la existencia de partículas extrañas en el circuito, con el deterioro del filtro de aceite o con una mala instalación de la propia bomba. A la hora de reparar la avería de la bomba de aceite es importante identificar el origen del fallo y los motivos que lo han provocado. Pero ¿cómo saber si la bomba de aceite no funciona?
Averías más frecuentes de la bomba de aceite
Las averías más frecuentes que puede tener la bomba de aceite suelen estar relacionadas con una falta de presión o con partículas dentro del circuito. En otras ocasiones, una bomba de aceite rota puede deberse a un filto en mal estado.
Una falta de presión no tiene que suponer un daño en la bomba. Hay veces en que el motor tiene problemas de presión ocasionados con alguna fuga o problema de funcionamiento de la bomba de alivio.
La avería más común de la bomba de aceite son las pérdidas de aceite a través de la junta de la bomba. Cuando esto ocurre, la solución de este problema consiste en sustituir la junta dañada por una nueva.
Otra posible avería puede darse cuando los dientes de los engranajes están sometidos a gran presión. En estos casos, pueden desgastarse y provocar fallos en la bomba.
Cómo identificar una avería en la bomba de aceite
El primer indicio de un posible fallo en la bomba o en el circuito de aceite es el encendido del testigo luminoso situado en el cuadro de instrumentos. Se enciende cuando existe un problema de presión o de caudal y, si el problema es grave, también se iluminará el testigo de fallo en el motor.
Para determinar si la bomba tiene problemas de presión a consecuencia de fugas o entradas de aire en el circuito, exceso de lubricante, holguras por desgaste o mal ensamblaje, debemos tener en cuenta lo que la Red Operativa de Desguaces Españoles recomienda seguir estos en pasos:
- Comprobar que el cárter esté en buenas condiciones: Para ello, hay que controlar el nivel de aceite y verificar que la varilla de medición y el propio aceite sean los adecuados.
- Verificar la presión del bloque motor: Así se comprueba que el motor esté accionando la bomba y que sus indicadores funcionen adecuadamente.
- Controlar la colocación y las funciones de la bomba: Para ello, es preciso fijarse si el eje de la bomba o si el intermedio entre el eje y el distribuidor se hallan en buen estado. También habrá que mirar si la colocación de la bomba es la adecuada y si todos sus tornillos están bien ensamblados. Comprobar, finalmente, si hay restos de aceite en las superficies de montaje.
- Comprobar que no hay partículas metálicas: Retirar el cárter y verificar que no existen partículas metálicas en el módulo de aspiración de la bomba.
