Un estudio de Forbes, basándose en datos de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico de Estados Unidos, los fabricantes de automóviles emitieron aproximadamente 300 llamadas a revisión de vehículos por problemas relacionados con la seguridad durante 2022, afectando a millones de modelos. Cifra que está por debajo del récord de 406 realizadas durante 2021.
Entre las principales marcas, Ford lidera entre las marcas con mayor cantidad de llamadas a revisión, con 67 campañas que afectaron a 8,6 millones de vehículos. Según los informes, estos incluyen alrededor de 250.000 camionetas F-250 y F-350 Super Duty, y alrededor de 350.000 SUV Bronco y Escape por problemas de fugas de aceite que podrían iniciar incendios.
En el otro extremo cinco compañías, incluidas Bugatti, Ferrari, Maserati, Mazda y Polestar, emitieron solo una llamada a revisión cada una. Sin embargo, Ferrari, recuperó más de 23.555 unidades que datan de 2005 por un posible fallo en los frenos.
Estas llamadas se emiten cuando los propietarios de vehículos, reguladores o fabricantes determinan que un componente defectuoso presenta un riesgo de seguridad irrazonable o no cumple con los estándares establecidos a este respecto. Los componentes más comunes para desencadenar campañas relacionadas con la seguridad incluyen cinturones de seguridad, frenos, componentes eléctricos o cableado, neumáticos, pestillos de puertas, bombas de combustible e interruptores de encendido.
Sin embargo, no todas hacen referencia a problemas potencialmente peligrosos. A veces se vuelve a llamar a los vehículos para realizar correcciones tan pequeñas como cambiar algunas páginas en el manual del propietario de un vehículo que faltaban o contenían información errónea.
Así, los administradores federales y los constructores de automóviles garantizan la seguridad de los automovilistas, además, ahorran la molestia de llevar un automóvil o camión al concesionario para una inspección y reparación. En el caso de arreglos importantes que afectan a cientos de miles de modelos, los propietarios pueden tener dificultades para solucionar el problema de manera oportuna debido a un departamento de servicio con exceso de trabajo y/o escasez de piezas.
Por lo tanto, no es de extrañar que Carfax informe que más de 50 millones de vehículos continúan siendo conducidos con uno o más problemas conocidos que aún no se han reparado. Cabe destacar que, si bien Tesla emitió 20 llamadas durante 2022 que afectaron a casi 3,8 millones de vehículos, muchos de ellos pudieron abordarse mediante actualizaciones inalámbricas.
Aquí están los 10 fabricantes de automóviles que hicieron la mayor cantidad de llamadas a revisión en 2022 y el número total de vehículos involucrados:
- Ford: 67 llamadas, 8.636.265 unidades.
- Grupo Volkswagen: 45 llamadas, 1.040.885 unidades.
- Fiat-Chrysler/Stellantis: 38 llamadas, 3.041.431 unidades.
- Mercedes-Benz: 33 llamadas, 969.993 unidades.
- General Motors: 32 llamadas, 3.371.302 unidades.
- Kia: 24 llamadas, 1.458.962 unidades.
- Hyundai: 22 llamadas, 1.452,.101 unidades.
- Tesla: 20 llamadas, 3.769.581 unidades.
- BMW: 19 llamadas, 1.000.455 unidades.
- Nissan: 15 llamadas, 1.568.385 unidades.
Cada vez que se emite una llamada relacionado con la seguridad, el fabricante de automóviles debe comunicarse con todos los propietarios registrados para ese modelo en particular por correo. Sin embargo, puede ser difícil o francamente imposible para un fabricante ponerse en contacto con un segundo o tercer propietario, lo que ayuda a explicar por qué los modelos más antiguos suelen tener los porcentajes más altos de llamadas no corregidas.
