Volkswagen y el Departamento de Justicia de Estados Unidos han llegado a un acuerdo mediante el cual el fabricante se compromete a pagar una multa que asciende a casi 4.100 millones de euros.

De esta forma, la enseña pretende que quede resuelto el caso del software que alteraba las emisiones contaminantes en algunos de sus modelos en el país norteamericano (unos 475.000 vehículos afectados). La firma señala que no puede saber aún con exactitud el impacto que esta cantidad tendrá en sus cuentas financieras.

El acuerdo final al que deben llegar ambas partes, y que incluye una declaración de culpabilidad por parte de la empresa, todavía está sujeto a la aprobación de los consejos de gestión y supervisión del grupo, según apunta Volkswagen.

La compañía alcanzó recientemente un acuerdo con las autoridades estadounidenses con el fin de recomprar o reparar 83.000 vehículos de las marcas Audi, Volkswagen y Porsche con el motor diésel V6 que incorpora el software manipulado.

Por otro lado, esta semana el FBI detuvo al responsable de Compliance del consorcio automovilístico en Alemania entre 2014 y marzo de 2015, Oliver Schmidt, por posible conspiración para defraudar en el caso del dieselagate, según publica The New York Times.