Citroën ha asegurado que el problema del inflador del airbag en algunos de sus modelos no afecta a ninguno de los vehículos de la marca en España.

El problema al que la compañía hace referencia se dio a conocer este lunes por la OCU, cuando el sistema de alerta rápida de productos peligrosos no alimentarios (Rapex) trasladó a los consumidores un fallo relativo al inflador del airbag en los Citroën C3, C4, DS3, DS4 y DS5 fabricados entre 2009 y 2017 que podría afectar a alrededor de 300.000 unidades.

Rapex es un sistema unificado de alerta de productos peligrosos para los consumidores de la Unión Europea que abarca todo tipo de productos no alimentarios. Su objetivo es prevenir el consumo de productos que supongan un riesgo para la salud y seguridad de los consumidores, informa Europa Press.