La patronal catalana de la distribución de vehículos, Fecavem, ha expresado su preocupación por la especial fragilidad con la que cree que el mercado de la automoción ha empezado el año en Cataluña debido a los nuevos tramos del impuesto de matriculación y la tasa sobre las emisiones.

El incremento de estos impuestos es un elemento más que impacta en un sector que atraviesa ya una crisis ocasionada por la falta de semiconductores y los problemas con los suministros de los vehículos, según ha alertado en su informe de final de año.

En todo 2021, se han matriculado en Cataluña 110.691 turismos, un 10,6% menos que el año anterior; 43.735 motocicletas, un 6% menos; y 19.252 furgonetas y camiones, un 16,4% menos.

En un comunicado, Fecavem afirma que la alta incertidumbre "hace difícil pronosticar cuántas unidades se matricularán este nuevo año", y asegura que "no ayuda para nada al sector el aumento de impuestos a causa de los nuevos tramos del impuesto de matriculación" y "el problema añadido" de la tasa catalana que grava las emisiones.

Así, ha recordado que la Generalitat espera recaudar en 2022 un total de 120 millones de euros por la tasa sobre las emisiones contaminantes, una cantidad que dobla casi los 66 millones previstos en 2021.

"No estamos de acuerdo con esta presión fiscal", ha señalado, tras apuntar que el impuesto perjudica en especial a las empresas del sector, que tienen que pagar también por su "stock" de vehículos destinados a la venta, lo que encarece el coste de comercialización frente al resto de comunidades autónomas.

Además, Fecavem alerta que el freno en la renovación del parque de vehículos que circulan también impacta en el medio ambiente, ya que no se incorporan los que minimizan la huella ecológica, informa Efe.