La patronal de los concesionarios Faconauto augura un año 2019 difícil para la automoción en nuestro país. Así lo indicó hoy su presidente, Gerardo Pérez, durante la tradicional comida de Navidad con la prensa, donde reconoció que "el último cuatrimestre se han complicado mucho las ventas de coches, con los últimos cuatro meses de caída".

Los concesionarios temen la posibilidad de que se produzcan en los próximos meses cambios normativos o de fiscalidad que afecten al sector y, junto a la merma en la confianza de los consumidores, impacten directamente en el mercado del automóvil, que se estancaría o incluso caería durante el próximo ejercicio.

La previsión de matriculaciones para 2019 se quedaría de nuevo en 1,3 millones de unidades, la misma cifra que en 2018. Por canales de venta, Faconauto prevé que el de particulares caerá un 6%, mientras que el de empresas crecería sólo un 4% y el rent a car no variaría.

La patronal considera que técnicamente el mercado estará en retroceso el año que viene. Este podría ser más profundo en función de la evolución que tengan la economía, el empleo, el consumo o el contexto político. 

Concretamente, Gerardo Pérez ha hecho referencia a la influencia en las ventas que puede tener a corto plazo la futura legislación de cambio climático y transición energética, así como el aumento impositivo al diésel o las restricciones al tráfico que están implantando algunas ciudades. También ha recordado que los años electorales, como 2019, suelen retraer el comportamiento de los compradores, que tienen más dudas a la hora de efectuar desembolsos importantes, como un vehículo.

Tres vías para un parque más ecológico

"Faconauto comparte los objetivos del Gobierno de un parque de automóviles más limpio, y está en línea con nuestra agenda para el futuro del sector. No obstante, la renovación del parque y sus plazos deberían tener en cuenta la realidad del mercado, las necesidades del ciudadano y las alternativas disponibles para aportar certidumbre y confianza. Algunas medidas, tomadas sin contar con el consenso del sector, han contribuido ya a discriminar unas tecnologías frente a otras, sin una planificación previa. Este clima negativo está afectando ya a las ventas", manifestó Gerardo Pérez.

En este sentido, recordó que para alcanzar un parque limpio en 2050 "habría que cambiar 750.000 coches al año todos los años. Para hacernos una idea, en 2018 se van a cambiar sólo 8.000. A ese ritmo va a ser imposible".

De cara a descarbonizar el parque automovilístico español, Faconauto propone un plan con tres vías. Una, el achatarramiento del coche antiguo e incentivo de la compra del nuevo, que podría ser progresivo en función del nivel de emisiones del vehículo. La segunda, mejorar la infraestructura para el eléctrico: "Si las Administraciones Públicas no hacen su parte, no pueden exigir al ciudadano". Y la tercera, fomentar las energías alternativas.

Por todo ello, en este momento, más que nunca, en la patronal creen que el "rol de los concesionarios es crucial para permitir que la demanda se encuentre con la oferta". En este contexto, el presidente de Faconauto ha destacado que el sector de la distribución y reparación de vehículos se encuentra en un momento de transformación y modernización, que no sólo tendrá repercusión sobre la automoción, sino también sobre la economía y la sociedad en general.

Esa modernización está obligando ya a los concesionarios a movilizar recursos, de tal forma que se prevé que el sector incrementará sus inversiones un 8,5%, destinando 2.000 millones de euros en los próximos dos años, que impactarán en el desarrollo económico local, en la transformación digital, la formación y capacitación y en la descarbonización de la movilidad. Estas inversiones podrían generar unos 21.000 puestos de trabajo durante ese periodo, aunque se buscan perfiles mucho más digitales.