El fabricante de coches Ford ha anunciado estos días que realizará tres llamadas a revisión que afectarán a más de 400.000 unidades en Estados Unidos por problemas de filtraciones de aceite y combustible.

La mayor parte de los vehículos afectados pertenecen al modelo Ford Escape 2010-2012 y Mercury Mariner 2010-2011, ambos equipados con motores de 3 litros.

La compañía ha señalado que los concesionarios de este país procederán a reemplazar la brida del módulo de suministro de combustible con el fin de prevenir la aparición de una fisura que filtre el fuel.

En cuanto a la llamada a revisión por un problema en la unidad del refrigerador del aceite del motor, afecta a unos 8.000 coches del modelo Ford Mustang Shelby GT350/R 2015-2017. La firma indica que la pieza puede haber sido instalada sin los enganches suficientes, lo que podría provocar la separación de un conducto y la pérdida de aceite.

Por último, la tercera remesa de coches con problemas implica a 180 unidades de la camioneta Ford Super Duty Chassis Cab 2017 de 6,7 litros diésel por un fallo en el aislamiento protector del módulo de condicionamiento del combustible.

Los elevados costes que suponen todas las llamadas a revisión (549 millones de euros) a las que ha tenido que hacer frente la enseña en los últimos tiempos, junto con el debilitamiento de la demanda en Estados Unidos, han afectado de manera importante a Ford en el tercer trimestre del año, reduciendo sus beneficios netos el 56,1%.

Por otro lado, en Europa, la firma explica que las ventas de vehículos comerciales han aumentado, lo que ha permito el sexto trimestre rentable de forma consecutiva y el cuarto con mejoras de costes con respecto al mismo periodo del año anterior.