Vigilar que los vehículos objeto de reformas realizadas en los talleres después de su matriculación sigan cumpliendo los requisitos técnicos exigidos para su circulación. Este objetivo ha propiciado la aprobación de un Real Decreto que a partir de ahora regulará la actividad de todos los operadores implicados en este tipo de intervenciones, entre ellos fabricantes, distribuidores y talleres especialistas especialistas del tuning.

Según el Gobierno, la nueva normativa adapta determinados conceptos y exigencias a una Directiva comunitaria de 2007 sobre homologación de los vehículos de motor y de los remolques, sistemas, componentes y unidades técnicas independientes destinadas a dichos vehículos. En el año 2008 se efectuaron más de 165.000 reformas de vehículos, según datos aportados por la Administración. Con este real decreto, se deroga una legislación que contaba con más de veinte años de antigüedad y a la que se achacaba cierta confusión en sus preceptos.