Los talleres de Murcia se han erigido en prescriptores de seguridad para los conductores de la provincia a raíz de una operación a gran escala puesta en marcha por la Guardia Civil contra grupos que vendían gasóleo adulterado para vehículos.

Lo han hecho a través de declaraciones en la prensa local en las cuales hablaban sobre las consecuencias que puede acarrear repostar combustible barato y de mala calidad, una tendencia al alza a causa de la crisis.

Así, el presidente de la patronal Gretamur, Francisco Hernández, indicaba que los daños que puede causar un mal combustible son distintos según el vehículo, siendo más graves y sus reparaciones más costosas en el caso de los diésel. “Pueden obligar incluso a cambiar el depósito o las tuberías del combustible”, explicaba.

También indicaba que es posible analizar el automóvil para comprobar si su avería se debe al gasóleo utilizado, aunque es necesario para ello acudir a talleres con el equipamiento necesario. “Si no se acude al especialista, esto se puede alargar”, destacaba.