Reparación | Desarticulada una banda dedicada al robo de catalizadores en Andalucía

Siete personas han sido detenidas en Málaga y en Sevilla por su presunta implicación en 53 hurtos de catalizadores. El paladio, rodio y platino que albergan en su interior son muy cotizados en el mercado negro.

En el registro se encontraron herramientas específicas para la sustracción de tales piezas
En el registro se encontraron herramientas específicas para la sustracción de tales piezas

Hace solo unos días, la Asociación de Talleres de Málaga alertaba de un repunte de robo de catalizadores. Ahora, la Opinión de Málaga recoge las detenciones de los integrantes de un red dedicada al robo de estos elementos de los vehículos.

Se trata de siete detenidos en Málaga y Sevilla por su presunta responsabilidad en 53 hurtos de catalizadores tanto en Andalucía como algunos cometidos en la Comunidad Valenciana. La operación denominada 'Cata-Tartana', realizada de modo conjunto por investigadores de la Comisaría de Distrito Norte en Málaga y agentes adscritos a la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría de la localidad malagueña de Marbella, se inició a finales de 2021 a partir de varias denuncias por la sustracción de catalizadores en las provincias de Málaga y Sevilla.

Según recoge La Opinión de Málaga, desde la Comisaría provincial de Málaga han explicado en un comunicado que "lo valioso de estas piezas son los metales que albergan en su interior (paladio, rodio y platino), muy cotizados en el mercado negro".

La colaboración ciudadana permitió seguir la pista a un vehículo empleado por miembros de la trama en sus desplazamientos. El coche fue detectado en Málaga y seguido por los agentes hasta Sevilla, ciudad esta última donde habían fijado su residencia. Según las pesquisas, los sospechosos tenían un claro reparto de funciones, ya que mientras algunos hacían labores de vigilancia, otros ejecutaban el trabajo de fuerza, situándose debajo de los coches y con el uso de herramientas de corte (radiales alimentadas por batería) separaban la caja del convertidor catalítico del tubo de escape en apenas unos minutos.

Los investigados formarían parte de una organización criminal con carácter itinerante. Una vez alcanzado el botín, la supuesta red almacenaba los catalizadores sustraídos y los trasladaba a un emplazamiento seguro donde extraían los materiales valiosos. El fin de estos metales sería su venta en el mercado clandestino.

Asimismo se practicaron tres registros domiciliarios en la capital sevillana, interviniéndose cinco catalizadores, herramientas específicas para la sustracción de tales piezas de vehículo, 7.700 euros en efectivo y joyas de oro que arrojaron un peso total de 1.400 gramos.De los hechos conoce el Juzgado de Instrucción número 7 de Málaga y siete detenidos fueron puestos a disposición judicial, han precisado las mismas fuentes.

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