Aspectos a tener en cuenta antes de que el coche pase la prueba de gases de la ITV

Si el coche emite humos negros evidentes cuando acelera, es probable que no supere esta prueba.

La prueba de gases es una de las más temidas de la ITV

Desde que entró en vigor el nuevo reglamento de reformas de las ITV, la prueba de gases se ha hecho más estricta. Es una de las causas que provocan mayor número de coches rechazados durante la inspección y, por ello, es muy importante saber en qué consiste la prueba y qué factores elevan las emisiones, de cara a corregirlos antes de que los vehículos de los clientes acudan a pasar la ITV.

Según señalan desde Kraft Auto, en el caso de los vehículos con motor diésel, una de las pruebas clave para pasar la inspección es la de opacidad. En esta prueba se mide la opacidad de los gases de escape mediante el uso de un opacímetro, es decir, cuántos humos negros emite el vehículo.

La prueba consiste en acelerar el vehículo a fondo y se realiza tres veces, para luego calcular la media de las tres mediciones. Si vemos que el coche del cliente emite humos negros evidentes cuando se le da un acelerón, es probable que no pase esta prueba.