El cerco a los talleres ilegales sigue activo. Así lo refleja la prensa local de Almería, que destaca que en 2012 se han clausurado seis establecimientos clandestinos y que algunos empresarios de talleres legales se han llegado a plantear el cierre de sus propios negocios ante la proliferación de esta competencia desleal.

Según datos de la Junta de Andalucía, los seis talleres que ha ordenado cerrar en Almería trabajaban sin licencia. En su detección colaboran los inspectores del ente autonómico y los agentes de la Guardia Civil integrados en el Seprona, que han denunciado a 21 reparadores clandestinos en la provincia en 2012.

La Junta de Andalucía impone sanciones desde 1.000 hasta 3.000 euros dependiendo de la gravedad de la infracción, así como de la reincidencia del titular del taller que no cumple con las obligaciones que contempla la ley.