La compañía Skoda ensalza los beneficios del coche eléctrico; por ejemplo, aseguran que contar los kilómetros será innecesario para los servicios de revisión de este tipo de vehículos, dada su sencillez mecánica. Lo único que tendrá que recordar el propietario del mismo es un período de dos años entre visitas al taller, según declaraciones de la compañía, recogidas por coches.com.

Skoda manifiesta que la única medida que importará para rastrear el próximo servicio será el tiempo. "No hay necesidad de cambiar el aceite, los filtros de aceitde y combustible o las bujías. Las únicas tareas estándar que quedan son cambiar el filtro interior de polvo y polen, el líquido de frenos y revisar el aire acondicionado, los limpiaparabrisas y otros consumibles. Los vehículos eléctricos también tienen que cambiar su líquido refrigerante después de algunos años, pero incluso esto es más económico que un servicio similar para los coches convencionales”.

LA BATERÍA SE DEGRADARÁ

Un automóvil eléctrico también ahorra en costes de servicio de otras maneras. Karel Starý, responsable de posventas de Skoda en la República Checa señala que gracias a la recuperación de energía, los coches eléctricos “funcionan mejor con el sistema de frenos y no hay necesidad de reemplazar las piezas desgastadas como las correas de distribución, los inyectores, el embrague, el volante bimasa, los filtros de partículas, la válvula EGR, el turbocompresor y otras partes”.

Skoda indica que la batería se degradará, aunque defiende que, cuando esto ocurre, se cambiará el módulo de la batería que se degradó.