Los sensores de radar y sistemas ADAS: la iniciativa ECEC explica cuándo calibrarlos

Elige calidad, elige confianza (ECEC) advierte sobre la importancia del mantenimiento de los Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción y explica en qué momentos es necesaria la calibración de radares y cámaras para garantizar la seguridad.

La calibración de los ADAS es esencial, sobre todo, por el progresivo avance de la conducción autónoma

Elige calidad, elige confianza (ECEC), iniciativa formada por fabricantes de componentes de automoción de primer nivel, advierte que “resulta esencial, de hecho, cada vez más, dado el progresivo avance hacia la conducción autónoma”, la adecuada revisión y mantenimiento de los radares y de las cámaras en los Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción (ADAS), como pueden ser los detectores de ángulo muerto, el control de crucero adaptativo o el sistema de detección de peatones y freno autónomo.

ECEC, cuya labor se centra en llevar a cabo acciones de concienciación en pro de la seguridad vial, afirma que un fallo en el sensor de radar afecta directamente a los sistemas ADAS, así como a los sistemas de seguridad activa y pasiva del vehículo, además de activar la fase de emergencia del vehículo.

Por lo tanto, es determinante para la seguridad en la conducción un adecuado mantenimiento de los sensores, por lo que ECEC recomienda calibrar siempre los ADAS ante trabajos de reparación de carrocerías, intervenciones en el chasis, como alineación de ruedas o tuning; sustituciones de parabrisas o trabajos con los ECU (Engine Control Unit) o con sensores DAS (Distributed Acoustic Sensing).

Limipar superficies de medición

Básicamente, el mantenimiento consiste en mantener limpias las superficies de medición tanto en radares como parabrisas delantero y lentes de cámaras perimetrales y trasera, para lo que debe realizarse la calibración de los sistemas, con un previo ajuste correcto del sensor. Los sensores ADAS, en circunstancias normales, se alinean en función del eje de conducción geométrico. Salvo excepciones, la línea central del vehículo es la referencia.

En el caso del radar, la calibración ha de efectuarse siempre que se haya desmontado y montado el sensor de radar, si el componente sensor de radar no reconoce el vehículo. Igualmente, si la memoria de averías ha registrado algún fallo y siempre que se realice una alineación de los ejes o un ajuste de nivel de altura en el vehículo. También debe recalibrarse si el soporte del componente está flojo, desplazado o deformado después de repararlo, si se ha sustituido el componente, previa configuración con equipo de diagnosis; cuando el componente hubiese sido dañado, por golpe o manipulación; de forma preventiva si el vehículo hubiera tenido un golpe bastante fuerte, así como si se desmonta el paragolpes, en el caso de que el radar vaya fijado a él.

Calibración de cámaras

Por su parte, la cámara requerirá de calibración siempre que se sustituya el parabrisas, al igual que cuando se desmonte o monte la cámara y siempre que tenga averías grabadas en el calculador. Las cámaras de visión trasera para aparcamiento necesitan estar bien limpias y colocadas con respecto a la carrocería, además necesitan calibración al ser sustituidas, al variar la alineación del vehículo, al haber sufrido un golpe el vehículo o al tener fallos en la unidad que procesa la imagen.

Estas cámaras pueden necesitar ajuste estático o estático y dinámico, lo que puede requerir equipo de diagnosis para lanzar el calibrado o, en algunos casos, auto calibrarse solas según las indicaciones de cada fabricante.