La tentación por parte de los propietarios de vehículos de intentar arreglar o pintar ellos mismos sus coches a veces no acaba bien. Hace unos días en la localidad de Súria (Barcelona), un hombre de 38 años falleció intoxicado al pintar su coche en el garaje de su casa.

El lugar tenía unos 35 metros cuadrados y, según algunas fuentes, carecía de ventilación. Al proceder al repintado de su vehículo, el joven barcelonés se acabó intoxicando y, como consecuencia, quedó inconsciente.

A la vivienda acudieron efectivos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) que, tras 40 minutos de maniobras cardiorrespiratorias, sólo pudieron certificar su fallecimiento.

Ante este tipo de sucesos, los profesionales del sector recomiendan siempre acudir a un centro especializado para que este tipo de prácticas sean llevadas a cabo por expertos que cuentan con equipos de trabajo y materiales adecuados para realizar con seguridad este tipo de procesos.

Asimismo, señalan que para pintar los coches se utilizan agentes químicos que pueden poner en peligro la salud. Por este motivo, es necesario dejar a pintores y chapistas formados estos trabajos.