Chapa y pintura | Cómo evitar la aparición del "efecto seda" durante el repintado

PPG explica que este desperfecto se hace evidente en colores metalizados cuando las partículas se sitúan en la misma dirección.

Cómo evitar la aparición del "efecto seda" durante el repintado
Las causas pueden ser la disolución errónea de la mezcla o la aplicación incorrecta

Las innovadoras tecnologías que emplean en la actualidad los talleres de chapa y pintura permiten realizan trabajos más eficientes y acabados perfectos. A pesar de estos avances, los defectos en el repintado de vehículos no pueden eliminarse por completo, pues son muchos los factores que influyen en su aparición.

El "efecto seda" es uno de estos desperfectos que surge durante el repintado, y que se hace evidente en colores metalizados cuando las partículas de aluminio se sitúan en la misma dirección. Los profesionales de PPG han explicado que este defecto aparece principalmente en superficies verticales, consecuencia del propio peso del aluminio. La pintura "gotea" hasta llegar casi a descolgarse.

Entre los motivos más frecuentes de su aparición destaca la disolución errónea de la mezcla, el ajuste incorrecto de la pistola o una mala aplicación. Dejar poco tiempo de evaporación entre capas también puede originar este desperfecto.

PPG recomienda consultar la ficha técnica del producto y utilizar siempre la técnica de aplicación que sugieran los profesionales. Asimismo, es importante que no se apliquen manos muy cargadas, seguir los ratios de dilución marcados, utilizar una buena práctica de aplicación y calcular los tiempos de evaporación.

Si al final de todas las etapas del proceso termina surgiendo este defecto, la solución pasa por lijar y repintar de nuevo el vehículo.

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