Cinco mujeres, representantes de varios segmentos de la posventa, desde la distribución a la fabricación de componentes, pasando por el taller y hasta la prensa especializada, protagonizaron la mesa redonda "La mujer en la posventa", sin duda, uno de los platos fuertes de la jornada 'Pisando fuerte en la posventa', organizada por Serca en Madrid con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Un debate en el que quedó patente que se ha avanzado mucho, aunque aún queda trabajo por hacer, especialmente en el ámbito del taller, donde sí hay gerentes y administrativas, pero muy pocas mujeres aún en los puestos técnicos.

En representación de los fabricantes de componentes, Cristina San Martín (directora de Coordinación, Proyectos y Servicios de Sernauto) cifró actualmente en el 25% la presencia de mujeres en el sector de los componentes de automoción, aunque en puestos directivos por debajo de esa cifra y "peor posicionados que otros sectores", pese a que se trata, en general, de "trabajo de calidad, bien remunerado, repartido geográficamente e innovador". Sin embargo, defendió que "no tenemos que hablar solo de mujeres líderes, sino que hay que hablar en todos los puestos", porque el de la posventa "es un sector bastante masculino" en el que es necesario visibilizar esos perfiles donde hay mujeres. De hecho, aseguró que la mujer por sus propias características biológicas, es muy apropiada para muchos puestos gracias a cualidades como que "trabajamos bien en entornos cambiantes; capacidad empática; escucha activa; somos pragmáticas...", cualidades todas ellas que hacen muy interesantes los perfiles femeninos en puestos de alta dirección.

En líneas similares se manifestó Paula Aldea, directora de Comunicación y Marketing de Ancera, para quien "hay una evolución, pero hay mucho camino por recorrer" para conseguir mayor presencia de la mujer en la distribución de recambios, "un sector históricamente masculino" y en el que 9 de cada 10 puestos están ocupados por hombres. Pese a ello, defendió la capacidad de las personas, independientemente de su género: "El gran desafío es hablar de currículos sin más, dejar de hablar de hombres o mujeres.

"Desde Ancera el desafío es transformar el sector, para que podamos centrarnos a nivel profesional" en mejorar el número de mujeres dentro del mismo. En su caso, con más de 13 años de trayectoria profesional en la posventa, Aldea encontró un sector en el que encontró oportunidades de desarrollo y de crecimiento, porque valora la capacidad creativa, la innovación, la atracción de talento joven y de ideas frescas y diferentes. Eso sí, reclamó más "capacidad de cambio y que los empresarios estén cada vez más abiertos a perfiles alternativos", además de la necesidad de facilitar la conciliación entre lo personal y lo familiar para conseguir atraer a más mujeres al sector.

Un panorama diferente en los talleres

Los contrapuntos a esos avances en materia de igualdad los pusieron las representantes de las patronales de talleres. Ana Ávila, directora corporativa de Conepa, dejó claro desde el primer momento que "el punto de vista del taller" es diferente a la fabricación y distribución de componentes. "Hay un cliché y es que las chicas no ven la mecánica como una salida laboral", por lo que, para eliminarlo, "hace falta educación, porque en las orientaciones no se habla de mecánica". Y, para muestra, un ejemplo reciente en la feria Aula, donde Conepa ha acudido para tratar de captar talento joven y donde la propia Ana Ávila se ha encontrado con algún ejemplo de una madre enfadada porque su hija había mostrado interés en ser mecánica.

"El desafío somos las propias mujeres y madres, tenemos que dignificar el sector del taller y conseguir hacer que el esté en el estatus que le corresponde, por garante de seguridad vial y por conservador del medio ambiente. Cuando se vea cómo es el taller, los jóvenes nos verán como una opción para el futuro", defendió Ávila, quien puso el ejemplo de los talleres madrileños de todo el camino que queda por recorrer: de los 17.200 trabajadores que tienen los asociados de Asetra, solo unas 1.000 son mujeres y el 98% son gerentes y administrativas.

En la misma línea se pronunció Lara Torres, que la próxima semana se oficializará su nombramiento como secretaria general de Cetraa, que compartió la idea del cliché al asegurar que "existe un cambio de mentalidad, pero no tenemos interiorizado que los puestos de mecánica pueden ser cubiertos por mujeres". "Tenemos que superar esa barrera pensando que es solo para hombres. Se requiere fuerza física, es cierto, pero hoy día hay herramientas que ayudan y tampoco el taller no es un lugar sucio y desordenado", recalcó, para solicitar mayor "relevancia a la figura del mecánico, pero no hombres o mujeres, sino que se necesitan profesionales cualificados con ganas de trabajar y con actitud".

En segundo lugar, Lara Torres pidió fomentar "la figura de la mujer empresaria, no solo en el taller, sino en general". En este sentido, considera que "la mujer emprendedora tiene más dificultades que el hombre"  y, por ello, "desde Cetraa trabajamos en que nos den apoyo las instituciones".

Por último, la visión de la prensa especializada la defendió Yvonne Rubio, directora de Mundo Recambio y Taller, defendiendo que la prensa del sector ha sido pionera en la integración de las mujeres a todos los niveles y que la posventa cuenta con la suerte de tener, no solo "mujeres preparadas que llevan adelante la profesión", sino también compañeros que las apoyan, si bien es cierto que el periodismo y las Ciencias de la Comunicación siempre han sido un reducto de mujeres, más que de hombres.