Los coches usados siguen ganando la partida a los nuevos en las preferencias de los conductores españoles. Así lo explica la patronal de los vendedores de coches Ganvam, que explica que las ventas de coches usados en España superaron a las de nuevos en el 61%.

Esto quiere decir que se ha consolidado la relación de 1,6 coches de ocasión vendidos por cada nuevo que ya se había alcanzado en el primer trimestre de 2009 (ver noticia). La proporción de ventas de usados sobre nuevos aumentó, así, dos décimas el pasado año respecto a 2008.

Aunque suene extraño a la luz de estas cifras, las ventas de usados cayeron el 5,1% en 2009. Que estos coches hayan ganado posiciones en las preferencias de los compradores y en el parque de vehículos se debe, sobre todo, a que las matriculaciones han tenido un comportamiento todavía más desastroso, con una caída del 18% (ver noticia).

La popularidad de estos vehículos es beneficiosa para los talleres de reparación, especialmente los multimarca, que suelen atender a vehículos que ya han superado su período de garantía.