Un nuevo modelo híbrido que marca tendencia, un Prius recargable y un dispositivo que para el motor si se detectan problemas. Con estas armas planta cara Toyota a la grave crisis de imagen que está atravesando después de haber tenido que llamar a revisión a más de ocho millones de vehículos en todo el mundo (ver noticia).

Estas novedades permiten a los talleres hacerse una idea de lo que traerá el futuro. El lanzamiento de la versión híbrida del modelo Auris supondrá que los Prius dejarán de ser prácticamente los únicos coches híbridos que pisarán el taller. Toyota también apunta en la dirección de los híbridos recargables mediante enchufe con la presentación para Europa de su Prius Plug-in Hybrid.  

Respecto a la seguridad, la compañía ha anunciado que instalará en todos sus coches un "freno adicional" que se activará cuando el conductor presione conjuntamente el pedal de freno y el del acelerador, si detecta problemas durante la conducción.

En España, la marca se ha comprometido a solucionar los problemas de los 108.300 vehículos llamados a revisión en un máximo de dos meses. Esta campaña de revisión le costará unos 2,5 millones de euros por diversos conceptos, entre los que se encuentra la factura de los talleres oficiales que llevarán a cabo los arreglos.