Los nuevos vehículos industriales que salgan al mercado a partir del 1 de noviembre de 2014 deberán contar con el sistema ESP. La normativa europea así lo exige. Postula que el programa electrónico de estabilidad (conocido como ESP o ESC) se convierta en equipamiento de serie obligatorio en todos los vehículos nuevos que se introduzcan en los países miembros de la Unión Europea. Esta obligación ya está vigente, desde el pasado 1 de noviembre, para los turismos y vehículos industriales ligeros (ver noticia).
La decisión fue adoptada por la Comisión Europea. Su finalidad es mejorar la seguridad vial en las carreteras europeas. "El ESP puede evitar hasta el 80% de los accidentes por derrape. Después del cinturón se ha convertido en el sistema de seguridad más importante en los vehículos”, según Werner Struth, presidente de la división Chassis Systems Control de Bosch. Dato especialmente relevante para los transportistas y conductores de vehículos industriales, debido al número de horas que pasan en las carreteras.
Bosch fue la primera compañía que fabricó en serie el ESP, en 1995. Desde entonces, ya ha suministrado más de 50 millones de sistemas ESP. En 2010, el 41% de todos los turismos y vehículos industriales ligeros fabricados en el mundo estaba ya equipado con este dispositivo. En Europa, ese porcentaje fue incluso superior, alcanzando el 63% del total de nuevas matriculaciones. Tras esta normativa, Bosch espera que, en 2013, uno de cada dos turismos nuevos esté equipado en todo el mundo con el sistema ESP.
