La DGT, a través de la Guardia Civil, se suma a la ‘Operación Truck and Bus’ para el control de vehículos destinados al transporte de mercancías y personas que la organización Internacional de Policías de Tráfico (Tispol) acaba de poner en marcha hasta el 4 de marzo.

La campaña tiene como objetivo controlar estos dos tipos de vehículos (autobuses y camiones), los cuales estuvieron involucrados en 2016 en el 11% de los accidentes con víctimas.

Así, los agentes incidirán en la vigilancia y control de aspectos como la velocidad, las horas de conducción y descanso, el tacógrafo, el exceso de peso, así como posibles defectos técnicos del vehículo.

También comprobarán la documentación y que la conducción no se realiza bajo los efectos de alcohol u otras drogas, o que todos los ocupantes hacen uso del cinturón de seguridad.

La vigilancia se realizará en toda clase de vías y a cualquier hora del día, especialmente en las carreteras en que la intensidad de la circulación de este tipo de vehículos es mayor.

En 2016, camiones de más de 3.500 kg de MMA y autobuses se vieron implicados en 6.283 accidentes con víctimas, en los que fallecieron 348 personas, subraya la DGT. La mayoría de los siniestros en los que estaba implicado un camión tuvo lugar en vías interurbanas, al contrario que en el caso de los autobuses, donde el mayor número se produjo en vías urbanas.

Por otro lado, la DGT recuerda que con el objetivo de mejorar la seguridad vial, Tráfico comunica a la Dirección General de Transporte Terrestre las sanciones cometidas por conductores profesionales reincidentes para que realice las investigaciones pertinentes sobre la empresa para la que trabajan y, así, estudiar la posibilidad de que las compañías que incurran en faltas graves pierdan la capacidad para operar en el mercado.