Aunque los profesionales del taller se caracterizan por dedicarse a la reparación o modificación de vehículos, existen distintos perfiles dentro de la actividad.

Loctite ha publicado un artículo en el que desgrana los siete tipos de reparadores más frecuentes en el sector. ¿Con cuál te identificas?

El primer grupo que destaca el post es el profesional tecnológico, que se caracteriza porque no va a ningún sitio sin su equipo de diagnosis. Tiene amplios conocimientos de tecnología y sistemas electrónicos, y utiliza una terminología muy técnica. Aunque no sea un experto en mecánica básica, se maneja bien con las innovaciones.

El restaurador de clásicos se caracteriza por tener un perfil autodidacta y su pasión son los coches clásicos. Para él, una reparación o una restauración es una obra de arte y un reto personal. Considera que el valor del coche se basa en sus años de antigüedad.

El novato, por su parte, se encarga de las tareas más sencillas del taller porque aún no tiene los conocimientos suficientes como para enfrentarse a trabajos de envergadura. El tiempo y la experiencia lo harán cambiar a otro grupo.

Al artista del taller se lo reconoce porque es un maestro de la pintura. Como señala el artículo, le vuelve loco cubrir sus obras con una tela para destaparla delante del cliente y que este se quede gratamente sorprendido.

Más que por sus conocimientos de mecánica, al reparador mediático lo define su carisma y su trato con la gente. Si eres un experto en sistemas de sonido y eres famoso en el mundo del tuning, este es tu perfil.

El amante de la competición adora las motos y, sobre todo, los rallies. Detrás de muchos de los vehículos que compiten en este tipo de pruebas suele haber reparadores de este tipo.

Por último, Loctite menciona el genio del garaje. Entiende su trabajo como hobby y su taller suele estar medio escondido en algún callejón poco transitado.