Dentro de 25 años, la propulsión de los vehículos en Europa, será, fundamentalmente, eléctrica.

Al menos, esto es lo que esperan los europeos, según lo recoge el último informe de movilidad del futuro elaborado por AutoScout24 tras encuestar a cerca de 9.000 conductores de siete países del viejo continente, entre ellos España.

El estudio ‘El coche del mañana’ concluye que en 2040 el coche eléctrico será una tecnología “consolidada” y no una “alternativa”.

En este sentido, los españoles son los que más confían en esta motorización, con un 37,4%, frente al 26% del resto de países. Y no es de extrañar teniendo en cuenta que el eléctrico es una opción de compra para el 50% de los españoles.

Según el informe, los europeos esperan que, dentro de 25 años, el 26,7% de los vehículos se mueva gracias a la energía eléctrica. Además, el 35,5% de los encuestados confía en que tengan una autonomía mínima de 500 kilómetros.

Por detrás de los eléctricos, encontramos los híbridos (24%) y los de hidrógeno (14,1%).

De este modo, y de cumplirse las previsiones, los modelos de combustión “tradicional” representarán únicamente el 6% del total, “lo que pone de manifiesto que la dependencia energética será una asignatura superada y el coste por kilómetro, por fin asequible”, afirma el estudio de la plataforma.

Tipo de propulsión dentro de 25 años. Fuente: AutoScout24

Más allá de la propulsión, el estudio refleja que la ciudad del mañana será un espacio silencioso, libre de emisiones, y en la que la movilidad (gestionada desde el smartphone) se entenderá como un “pack completo”, que permita usar el transporte más adecuado dependiendo del trayecto.

La seguridad y la comodidad serán factores de relevancia. Respecto a la primera, sigue siendo una de las grandes preocupaciones relativas al coche conectado.

En cuanto al confort, el 66,3% confía que en 2040 los coches sean capaces de encontrar aparcamiento de forma automática, el 70%, que el salpicadero actual se convierta en un único panel central comandado por gestos y voz y el 58%, que se regularán automáticamente la posición del volante, los espejos, la climatización y las emisoras de radio.