Un Plan PIVE que dure hasta que el mercado de vehículos nuevos se estabilice. Esta es la petición que ha realizado la firma Seat al Gobierno de España desde el Salón del Automóvil de Ginebra (Suiza).
Según su presidente, Jürgen Stackmann, España se debería basar en la experiencia de otros países como Alemania, donde las ayudas a las ventas de coches nuevos se mantuvieron hasta que el mercado alcanzó su nivel natural que, en el caso de nuestro país, se situaría en 1,2 millones de unidades matriculadas. 2014 cerró con algo más de 855.000 turismos matriculados.
En esta línea se ha mostrado el presidente de la patronal Ganvam quien ha defendido la continuidad de los planes de ayuda a la compra "hasta la normalización" de la economía y se ha situado en esos 1,2 millones, la cifra "razonable" para un país con el PIB de España.
Por su parte, Mikel Palomera, director de la marca en España, calcula que los fondos del nuevo Plan PIVE 7 durarán hasta finales de este mes y que, si no se renueva, el mercado cerrará el año en torno a los 900.000 coches vendidos. Sin embargo, si se mantienen las ayudas se podría alcanzar el millón de unidades.
Este tipo de incentivos contribuye a rejuvenecer la edad media del parque de vehículos, una tendencia que favorece especialmente a las redes de posventa marquistas.
