En Galicia, la batalla contra los talleres ilegales se intensifica. La Unidad de Policía adscrita a la Xunta de Galicia ha tramitado ya 90 denuncias contra talleres en los que encontró distintas irregularidades, en su mayoría “por carecer de todo tipo de documentación oficial reglamentaria, no estar dados de alta como Industria o no gestionar correctamente los residuos generados”.

Este resultado es fruto de una investigación que se ha traducido en visitas a 230 talleres de toda la comunidad autónoma gallega. Las inspecciones comenzaron en el año 2010 en Vigo y Pontevedra y se extendieron al resto de Galicia en 2012, a instancias de las denuncias presentadas por la asociación de talleres de Pontevedra (Atra) sobre la existencia de talleres ilegales.

La Policía ha realizado su labor investigadora siguiendo indicaciones de las asociaciones sectoriales, pero también por iniciativa propia o por denuncias interpuestas por particulares. De los talleres visitados, 45 estaban completamente en regla, 35 habían cerrado, cesando su actividad, y 60 continúan siendo investigados y sometidos a vigilancia. De los talleres denunciados, más de una tercera parte (32) estaban ubicados en Vigo.