Un antiguo responsable de un concesionario de Ponferrada (León) está siendo juzgado en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de la mencionada localidad por un delito de estafa y otro de falsedad documental por la venta de un coche de segunda mano al que manipuló el cuentakilómetros.

La acusación pide para el denunciado cinco años de prisión por los mencionados hechos que se produjeron en junio de 2015 cuando la víctima adquirió un Chevrolet Nubira con el odómetro alterado en el establecimiento del que el acusado era su representante legal, según publica el Diario de León.

Antes de la compra, apunta Luis Ramón González, abogado de la acusación, al cliente se le aseguró que el coche estaba en perfecto estado, que pertenecía a un residente en Suiza y que el automóvil contaba con 132.000 kilómetros.

Sin embargo, según el abogado, a los pocos días de la operación aparecieron los primeros problemas, descubriendo que el vehículo había sido un taxi, tal y como reflejaban los registros de la ITV, donde, además, se indicaba que el vehículo tenía en realidad 367.014 kilómetros.

Asimismo, el letrado señala que a los quince días de la compra, el cliente tuvo llevar el coche al taller que el vendedor le indicó, donde le sustituyeron el cambio automático por uno manual.

Sin embargo, en la ITV le confirmaron que este dispositivo debía estar homologado por el Ministerio de Industria y si no lo hacía antes de pasar la ITV, la documentación del automóvil quedaría retenida. Pero en el taller se negaron a darle una solución.

Por todos estos hechos, la acusación solicita tres años de prisión por un presunto delito de estafa y dos por falsedad documental, además del importe del préstamo suscrito con la financiera de la concesionaria. Por su lado, el Ministerio Fiscal sólo aprecia un delito de estafa, reclamando la misma pena que la acusación particular.