Diez personas se han sentado esta semana en el banquillo en Zaragoza acusadas de vender coches con el cuentakilómetros alterado. Dos de los acusados son trabajadores del taller de la Cooperativa de Taxis de la mencionada ciudad.

Los hechos tuvieron lugar entre octubre de 2014 y enero de 2015, periodo en el que los involucrados en la estafa llevaron a cabo un total de ocho operaciones: siete ventas de vehículos y una transmisión por la que no consta abono de cantidad alguna.

El escrito de acusación del ministerio público especifica que los investigados rebajaron 1.856.879 kilómetros a los coches antes de venderlos. Destaca el caso de un Toyota Prius con 474.000 kilómetros que fue puesto en el mercado con solo 50.000.

El agente de policía que instruyó el atestado, según publica Heraldo, señaló en el juicio que no cree que estos dos hombres manipularan el vehículo para alterar los kilómetros que había recorrido. Por otro lado, destacó el hecho de que todos los turismos investigados son taxis retirados del servicio que habían sido ofrecidos por sus dueños a estos dos mecánicos.

Según el instructor de las diligencias policiales, la modificación del instrumental de los taxis revendidos es "incuestionable”. En cambio, los agentes no han podido determinar el lugar en el que se realizaba la alteración de los odómetros.

La Fiscalía solicita para todos los involucrados en la presunta trama sendas penas de dos años y medio de prisión por delitos de estafa y pertenencia a grupo criminal, ya que considera que todos actuaron con ánimo de lucro, de forma coordinada y repartiéndose las funciones.