Recargar el coche al sol. Es el principio en el que se basa el desarrollo de la primera "fotolinera" que ha inaugurado en el Real Jardín Botánico Juan Carlos I de la Universidad de Alcalá de Henares, en la localidad madrileña. Se trata de una instalación con placas solares que permite la recarga de hasta cuatro coches eléctricos y cinco bicicletas con la energía procedente del sol, de ahí su nombre: fotolinera.

Los puestos de recarga tienen una aplicación para teléfonos inteligentes que informa sobre el tiempo previsto de dicha recarga y la hora prevista de retirada del vehículo. El tiempo de la operación depende de la capacidad de almacenaje de la batería del coche. Por ejemplo, se ha comprobado que un Renault Twizy se recarga completamente en tres horas y media.

La tecnología de esta fotolinera ha sido desarrollada por la compañía SDK Sendekia, formada por un grupo de ingenieros especialistas en diseño de máquinas, que, además, ha programado el software de la instalación. En la actualidad, la carga de coches en estos postes es gratuita para los usuarios. El exceso de energía que produce la fotolinera se utiliza para abastecer parte de las necesidades totales del jardín botánico en el que está instalada.