La Junta de Castilla-La Mancha ha dado por extinguido el incendio del cementerio de neumáticos de Seseña. Sin embargo, la parte ubicada en el municipio de Valdemoro aún sigue activa.

Según el consejero de Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, la Comunidad de Madrid tendrá que acelerar la combustión de las cubiertas para que puedan desaparecer las llamas. No obstante, los técnicos indican que en Valdemoro había menor acumulación de neumáticos y prevén que las labores en esa zona serán más fáciles.

Asimismo, Ruíz Molina añadió que dichas acciones "no se han podido realizar antes debido a que la policía judicial se encontraba investigando las causas que provocaron el fuego”.

Por su parte, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Francisco Martínez Arroyo, explicó que los dos responsables para la recuperación de neumáticos, en Campo de Criptana (Ciudad Real) y en Chiloeches (Guadalajara), ya se encuentran preparados para recibir el material salvado y que, según nuevos cálculos, llegarían a las 15.000 toneladas de las 90.000 totales.

Martínez Arroyo añadió que se están desarrollando trabajos para "reutilizar los neumáticos y restaurar medioambientalmente la parcela, una vez se hayan analizado los residuos de los neumáticos que sí han combustionado”.

Las dos comunidades afectadas por el incendio barajan dos posibilidades para el reciclado de los neumáticos que se salven. Madrid propone quemarlos en una cementera para servir de combustible a la planta.

Por su parte, Castilla-La Mancha plantea generar gasóleo que sea utilizado como combustible en la calefacción de los edificios de la administración pública. La financiación de este plan corre a cargo de los fondos europeos Feder.

La limpieza de las once hectáreas del vertedero supondrá un desembolso de cinco millones de euros, que se repartirá entre las dos comunidades autónomas.