La clave de la estrategia de crecimiento de Bridgestone pasa por el desarrollo de neumáticos como equipo original para fabricantes de vehículos. Con la incorporación en 2009 de Citroën a su lista de clientes, en la que ya figuraban Peugeot y Renault, la compañía suministra actualmente a los tres mayores fabricantes franceses de vehículos. Asimismo, ha  incrementado su volumen de ventas para turismos casi el 20% en la última década. 

La primera colaboración de Bridgestone fue para la marca Peugeot en 2003, cuando los neumáticos Turanza fueron seleccionados para el 307 (195/65 R15 91H ER30). A finales de 2010 se incluyó el modelo Turanza ER300 en el Peugeot 308 y en el 207 SW, el Potenza RE050A en el 207 la versión más potente, el Dueler H/P Sport en el 407, el  Duravis R630 en el Boxer y por último el Duravis R410 en el Expert.

La colaboración con Renault para los coches fabricados en Europa se produce en 2004, cuando el B250 fue elegido para el Renault Modus. La gama y el volumen de equipamientos incluye ahora al Potenza RE050A en los modelos Megane y Wind, el ER300 en el Clio y el Fluence, el B250 en el Scenic, el Modus y el Clio, y el Dueler H/L 400 en la Renault Kangoo.

Por su parte, Citroën ha incorporado los neumáticos Bridgestone Turanza ER300 en el C3 cinco puertas  y los Potenza RE050A en el modelo DS3 de 3 puertas.  En el último mes Bridgestone también ha anunciado que será el único proveedor para el nuevo DS3 Racing, que llevará neumáticos Potenza RE050A en la medida 215/40R18.