En los vehículos existen numerosos elementos que deben controlarse con valores y que no se encuentran en su nivel máximo o mínimo.

Un claro ejemplo de esto son las mayoría de las electroválvulas, como la de control de un turbo o la de presión de rail, donde no nos sirve con excitarlas al máximo o al mínimo, sino que hay que controlarlas con niveles de tensión medios.

Para ello, se recurre a una señal de frecuencia fija y ciclo de trabajo variable (señal PWM). Pero ¿qué es el ciclo de trabajo variable? En este vídeo se detalla en qué consiste este proceso.