Existen diversas técnicas para localizar las fugas de vacío: con máquinas de humo (la más aconsejable) pulverizando algún tipo de hidrocarburo (peligro de incendio) y algunas menos ortodoxas como la que hoy os mostramos en este vídeo. Y es que, como dice el refrán, "a grandes males, grandes remedios…".

A diferencia de los vehículos diésel donde el motor trabaja a admisión plena, sin precisar ningún tipo de restricción más allá de la mariposa de la EGR, en un gasolina, su funcionamiento depende de la cantidad de aire que entra al motor, por lo que esta debe estar en todo momento controlada por la mariposa de aceleración, con lo que el resto del circuito debe ser estanco. Cuando esto sucede, se presentan anomalías como inestabilidad del ralentí, regulación de la mezcla…

Este vídeo nos enseña cómo localizar las fugas de forma bastante curiosa...