Brembo acaba de hacer públicos los datos económicos de la compañía correspondientes al tercer trimestre de 2016. En este periodo, los ingresos consolidados netos del grupo ascendieron a 566,8 millones de euros, el 11,1% más que en el mismo periodo de 2015.

En el acumulado del año, a fecha 30 de septiembre, los ingresos de la compañía sumaban 1.713,7 millones de euros, el 10,6% más que en los nueve primeros meses del año pasado (en términos de consolidación y tipo de cambio, los ingresos crecieron el 11,8%).

Además, entre enero y septiembre, Brembo registró un beneficio neto de 186,2 millones de euros, lo que significa el 40,9% más que los 132,1 millones de euros del ejercicio anterior.

Las aplicaciones para automóviles contribuyeron una vez más al crecimiento de los ingresos con un aumento del 13,3%, mientras el negocio de moto también tuvo un buen desempeño, subiendo el 2,5%.

Por su parte, el área rácing creció, aunque ligeramente, con un aumento del 3,4%, mientras que el de los vehículos industriales se mantuvo prácticamente sin cambios (+0,5%).

A nivel geográfico, en comparación con el tercer trimestre de 2015, las ventas aumentaron en Italia (+8,5%), Alemania (+3,7%) y Reino Unido (+17,7%), mientras que en Francia disminuyeron el 10,0% (la compañía no ha ofrecido las cifras correspondientes al mercado español).

Las proyecciones, según la multinacional, "confirman un buen crecimiento de los ingresos durante el último trimestre del año y nos permiten mirar hacia los próximos meses con un optimismo cauteloso".

Por otro lado, Alberto Bombassei, presidente de Brembo, ha anunciado la "significativa expansión" de la planta que la compañía posee en Dabrowa Gornicza (Polonia), y que supondrá una inversión de 100 millones de euros.

El proyecto, cuyas obras arrancarán a finales de año, consiste en la construcción de 22.000 metros cuadrados adicionales para albergar una tercera línea de fundición y 12 líneas de mecanizado.

La capacidad de producción, según Brembo, se incrementará en 100.000 toneladas al año, con la opción de producir tanto hierro fundido gris (tradicionalmente utilizado para discos de freno) como hierro fundido nodular (usado para fabricar calibradores destinados a vehículos comerciales ligeros).