Competencia, sí. Guerra, no. Los vendedores de coches, a través de su patronal Ganvam, han fijado su postura ante la nueva legislación europea para talleres que acaba de entrar en vigor y protege a la reparación multimarca (ver noticia). Al contrario que otras patronales (ver noticia), se muestran conciliadores. Y consideran que talleres oficiales y multimarca deben seguir conviviendo y colaborando como siempre lo han hecho.

A pesar de que hubieran preferido esperar a que termine la situación de crisis antes de introducir nuevas legislaciones, así como el mismo tratamiento para venta y posventa de vehículos, los vendedores de coches prefieren mirar al futuro y apoyar la convivencia de talleres marquistas e independientes. Al final, va a ser el cliente quien decida entre las ventajas que ofrece una opción u otra. Eso es competencia. Pero no es ni debe ser una guerra, explican.

Sobre todo, Ganvam no se muestra en contra de que se apoye la competitividad de los talleres, algo que ya se venía haciendo con la anterior legislación, sino con el hecho de que se ha dejado de proteger al vendedor de vehículos frente a los constructores. Simplemente queremos un marco legal estable para que los concesionarios puedan rentabilizar sus inversiones, sobre todo en estos momentos de crisis, indica la patronal.

Asimismo, Ganvam no considera, como otras patronales, que la nueva legislación europea vaya a perjudicar tanto a los concesionarios que llegue a suponer un recorte drástico de su número (ver noticia) o de los puestos de trabajo que generan: Las realmente nocivas son otras circunstancias que inciden sobre la venta y posventa de vehículos: final de las ayudas a la compra de coches, incremento del IVA o recorte del salario a funcionarios. Eso sí que es grave para los concesionarios.