La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, se ha reunido recientemente con el vicepresidente de Anfac, Mario Armero, con el fin de revisar la situación del sector y los desafíos que tiene este por delante, entre los que ha destacado la transición hacia un nuevo modelo de movilidad de bajas y cero emisiones.

Armero subrayó en el encuentro que este cambio se haga de forma ordenada y rentable para todos los actores implicados, ya que, además de beneficiosa para el medio ambiente, también se ha de tener en cuenta la importancia económica y social que el sector fabricante de vehículos tiene en España, según indican desde la organización.

Por este motivo, el vicepresidente de la patronal solicitó a la ministra un nuevo impulso político que sitúe a España como un actor destacado en Europa para tomar la iniciativa en este cambio de modelo.

El nuevo paradigma “tiene que estar influido por la política industrial y por la política medioambiental, por ejemplo, incentivando los vehículos de bajas y cero emisiones”, explica Armero.

Así, los empresarios indican que la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética española puede configurarse como el marco más adecuado para la integración de todas las medidas a desarrollar para un modelo de desarrollo sostenible y bajo en carbono.

No obstante, Anfac ha solicitado que la Ley siga una aproximación integral y neutral desde el punto de vista tecnológico y no establezca límites de reducción sectoriales más allá de los ya comprometidos a nivel europeo para los sectores regulados, ya que la propuesta de la Comisión Europea para la reducción de las emisiones de CO2 para el año 2030 ya representa un gran reto, según afirma la asociación.

“Una reducción del 30% de las emisiones con respecto a las del 2020 es un objetivo muy exigente y condicionado a la evolución de las tecnologías alternativas en el mercado, así como al desarrollo de una red de infraestructuras de recarga real y eficiente”, explican desde la organización.

Asimismo, la patronal aboga por un impulso que frene el envejecimiento del parque circulante y que este se renueve. Por ello, Anfac cree que una nueva fiscalidad verde, integrada y con parámetros más exigentes medioambientalmente sería beneficiosa para alcanzar este objetivo.

Por otro lado, la economía circular fue otro de los puntos que se trataron en la reunión con la responsable de Medio Ambiente. Anfac recordó que en septiembre firmó la ‘Declaración por una Economía Circular 2018-2020’, con la que se pretende que el sector reduzca al mínimo posible el uso de recursos naturales en los procesos industriales.

Los residuos generados en esta área, según los empresarios, se han reducido en torno al 25% en los últimos diez años. Además, recuerda la asociación, los vehículos son más respetuosos con el medio ambiente y han alcanzado niveles muy altos de recuperación de los materiales utilizados: el 95% de su peso es reciclable cuando llegan al fin de su vida útil.