Toyota Motor Corporation ha decidido llamar a revisión a 16.000 modelos Prius de tercera generación en España para actualizar el software de la unidad de control electrónico (ECU) del inversor. La marca japonesa considera lo suficientemente importante este problema como para llamar a sus clientes a revisión ya que este inversor es el encargado de transformar la corriente continua en alterna para hacer funcionar al motor eléctrico, y viceversa.

El fabricante ha detectado la posibilidad de un sobrecalentamiento en el inversor que, si llegara a deformarlo, haría que el vehículo pasase a funcionar en ‘modo de conducción de seguridad’ encendiéndose un testigo en el cuadro de instrumentos. La intervención consiste en una reprogramación del software de la unidad de control electrónico, sin coste alguno para el cliente.

“En línea con nuestro compromiso de tolerancia cero y total transparencia hemos tomado la decisión de realizar esta acción preventiva para mejorar el software”, señala Jacques Pieraerts, presidente de Toyota en España. Además, la marca ofrecerá a los coches que tengan que someterse a esta actualización, una inspección gratuita de 20 puntos clave del vehículo.