Cada vez es más habitual el uso de barnices tintados y colores tricapa. Sin embargo, su reparación, así como el cálculo de su coste total, difiere del proceso habitual de repintado. El fabricante de pinturas y sistemas de repintado Standox ofrece varios consejos a este respecto.

El primero es que, cuando se trata de colores poco habituales, es necesario identificar el código del color antes de hacer el presupuesto. De este modo, se puede conocer si el vehículo tiene un acabado especial.

Además, la fase de preparación requiere más tiempo, puesto que se han de pintar las muestras y hay que tenerlo en cuenta en el presupuesto.

Si se requieren pigmentos especiales, el pintor debe comprobar si tiene en stock. En este sentido, el programa Standowin de Standox facilita la labor, localizando la fórmula tras meter los códigos del color, fabricante, modelo, año de fabricación del vehículo y nombre del color.

Desde Standox, recomiendan pintar una muestra antes de reparar cualquiera de estos novedosos colores, por lo que se aconseja pintar tres muestras de color base y dejarlos secar. Después se aplica una pasada en las tres muestras, una segunda en dos de ellas y una tercera en solo una.

Después, se aplica una capa de barniz en las tres muestras, se guardan debidamente identificadas y pasan a engrosar la documentación del color del taller.

En el caso de colores con efectos especiales, tres factores a tener en cuenta. El color del substrato, el tamaño de la zona dañada y su ubicación. Tanto el grosor de capa como el número de pasadas influyen en la refracción de la luz y en el aspecto del acabado final. La técnica recomendada en este caso es la del difuminado para acabados tricapa con efecto perlado.