Elegir la combinación adecuada de endurecedor y diluyente, pintar por la mañana y no olvidarse del grado de humedad de la zona son algunos de los consejos que conviene tener en cuenta en verano para lograr buenos resultados en el pintado de vehículos.

Samuel Martínez, responsable de Formación de Standox, alerta de las altas temperaturas que tienen muchas regiones durante los meses de más calor pero también del incremento en la humedad o de la ausencia de ella.

Este especialista señala, en primer lugar, que cuando los barnices se aplican a altas temperaturas, se tenga muy en cuenta la elección adecuada del endurecedor y diluyente, pues resulta crítica. Para evitar problemas de secado y asegurar un resultado impecable en términos de brillo y flujo, los pintores deben elegir productos de secado más lentos.

En algunas regiones, el verano significa niveles de humedad altos que pueden afectar a la aplicación de la base bicapa al agua. En esas zonas son más fáciles de aplicar. Los pintores necesitarán, por lo tanto, menos agua desionizada para preparar la pintura.

En un ambiente cálido y seco, sin embargo, la pintura de base agua se seca muy rápidamente y no se integra adecuadamente por lo que puede dar lugar a opacidad. El ajuste correcto del producto mantendrá la pintura húmeda el tiempo suficiente durante la aplicación para conseguir una correcta homogenización de la superficie.

Es aconsejable también llevar a cabo los trabajos de pintura más grandes con el fresco de la mañana y planificar el uso de la cabina de pintura con cuidado cuando la previsión del tiempo predice temperaturas extremas.

Finalmente, si se trabaja con una máscara de respiración en vez de un casco de protección completo, conviene usar una banda elástica en la frente. Ésta es una manera simple y eficaz de prevenir que las gotas de sudor caigan sobre la pintura fresca y arruinen un trabajo casi terminado.

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